Debido al cambio climático que azota al planeta, los desastres naturales están en aumento. El 30% de la población mundial afectada por estas devastaciones no recibe avisos de alerta temprana, lo que les impide prepararse adecuadamente y reducir los riesgos.
Según un reciente informe de la Fundación Lloyd’s Register, revela que tres de cada cuatro de estas personas disponen de un teléfono móvil que podrían recibir los avisos de emergencia.
Alertas tempranas
George Karagiannis, director del Programa de Riesgo y Resiliencia de Resilience Rising, señaló: “Los sistemas de alerta pública eficientes salvan vidas. Las advertencias anticipadas no solo permiten evacuaciones más rápidas, sino que también son cruciales para fomentar la confianza en los gobiernos y ayudar a hogares e individuos a sentirse mejor preparados antes de que ocurra un desastre”.
Señaló que estos datos son cruciales para atender la efectividad de iniciativas de Alertas Tempranas para todos los integrantes de las Naciones Unidas, cuyo objetivo es proteger universalmente contra fenómenos meteorológicos, hídricos y climáticos peligrosos a través del sistema de alertas tempranas.
La falta de acceso a sistemas de alerta temprana es especialmente crítica en regiones como Asia Central, África del Norte y África Central Occidental. También afecta significativamente a las personas que viven en zonas rurales, con bajos niveles de educación y escasa resiliencia financiera en sus hogares.
Uso de la tecnología
Aunque la tasa de población no avisada a tiempo ha disminuido ligeramente en comparación con la encuesta anterior (31%), persisten las desigualdades en el acceso a estos sistemas, subrayando la necesidad de enfocarse en áreas particularmente vulnerables.
La Fundación Lloyd’s Register menciona que los teléfonos móviles y los sistemas digitales de alerta temprana pueden ser clave para reducir esta brecha en el acceso a la información crítica. Aunque las redes móviles se han convertido en poderosos canales de comunicación, su potencial no se está aprovechando completamente en las zonas más necesitadas.
Resaltó que es esencial promover políticas que fomenten el uso de la tecnología móvil para la difusión de alertas tempranas, especialmente en regiones donde la infraestructura tradicional es limitada.
