La carretera México-Pachuca se encuentra bloqueada desde el 27 de agosto, luego de que varios choferes de transporte público decidieran cerrar el paso en protesta por la violencia que enfrentan en su labor diaria. El detonante de esta manifestación fue un ataque armado ocurrido alrededor de las 14:00 horas del martes, frente a la estación Ojo de Agua del Sistema de Transporte Masivo Mexibús, en el municipio de Tecámac, Estado de México (Edomex)
¿Por qué los transportistas cerraron la México-Pachuca?
De acuerdo con los primeros reportes, un grupo de hombres armados disparó contra varios choferes y sus unidades después de protagonizar una riña, de la cual se desconocen las causas, dejando a los transportistas y pasajeros en un estado de pánico y temor; según La Prensa, esta situación llevó a que más de 30 elementos de la Guardia Nacional y de la policía estatal acudieran al lugar en respuesta a un llamado de auxilio, pero los atacantes lograron huir antes de ser detenidos.
La violencia que se vive en esta zona no es un caso aislado, pues los transportistas ya han denunciado en repetidas ocasiones la falta de seguridad, extorsión y las amenazas constantes que ponen en peligro sus vidas y las de sus pasajeros. Ante la falta de respuestas efectivas por parte de las autoridades mexiquenses, los conductores han decidido mantener el bloqueo de la carretera México-Pachuca, que ya lleva casi 48 horas.
El cierre de la circulación en ambos sentidos de la México-Pachuca generó un gran caos vial, afectando a decenas de personas que utilizan esta ruta diariamente. Los conductores han sido enfáticos en que no levantarán el bloqueo hasta que las autoridades del Estado de México ofrezcan una solución concreta a sus demandas de seguridad.
¿Se prolongará el bloqueo en la carretera México-Pachuca?
La situación recuerda a lo sucedido a principios de agosto en la carretera México-Puebla, donde un grupo de ejidatarios cerró la vía durante más de 90 horas. A pesar de la gravedad de la situación actual en la carretera México-Pachuca, hasta el momento las autoridades no han dado información sobre la posibilidad de entablar un diálogo con los transportistas, lo que mantiene en suspenso a los usuarios de esta importante vía.
La falta de una solución inmediata podría prolongar aún más el bloqueo, exacerbando los problemas de movilidad y seguridad en la zona. Mientras tanto, la exigencia de los transportistas sigue siendo la misma, un freno a la violencia y una mayor presencia de seguridad que les permita realizar su trabajo sin el temor constante de ser víctimas de la delincuencia.
