El gabinete de seguridad informó que el exlíder del Cártel del Golfo, Osiel Cárdenas Guillén, fue ingresado al Centro Federal de Reinserción Social (Cefereso) No. 1 Altiplano, en el Estado de México, ya que en su contra estaba vigente una orden de aprehensión por delitos de Delincuencia Organizada en la hipótesis de delitos contra la salud.
Por la mañana fue deportado de Estados Unidos, en donde fue condenado a 25 años de cárcel por varios delitos de narcotráfico y crimen organizado, aunque fue extraditado en enero de 2007, solo cumplió 18 años de su sentencia al tener reducciones por colaborar con las autoridades y tener buen comportamiento.
Agentes de la Oficina de Detención y Deportación del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE-ERO, por sus siglas en inglés) entregaron a las autoridades mexicanas al fundador del grupo criminal “Los Zetas”.
“A las 09:25 horas, Osiel ‘N’, fue entregado por autoridades de Estados Unidos en la frontera de Tijuana, Baja California, posteriormente fue trasladado vía aérea a la Ciudad de México y aproximadamente a las 17:35 horas fue ingresado al Cefereso No. 1 en el Estado de México, sin que se registrara ningún incidente”.
En México enfrenta tres ordenes de aprehensión, ya que la Fiscalía General de la República (FGR) lo acusa de los delitos de homicidio calificado, delincuencia organizada y contra la salud.
Además de eso, con su regreso a territorio mexicano, continuarán siete proceso penales del orden federal, por su presunta responsabilidad en varios delitos.
Éstos son:
- Delincuencia organizada con la finalidad de cometer delitos contra la salud
- Delincuencia organizada con la finalidad de cometer operaciones con recursos de procedencia ilícita Delitos contra la salud
- Operaciones con recursos de procedencia ilícita
- Acopio, portación y posesión de armas de fuego y de cartuchos de uso exclusivo del Ejército
- Posesión de cartuchos de uso exclusivo del Ejército
- Cohecho
“Por estos delitos, se estima que Osiel ‘N’ alcance una pena aproximada de hasta 730 años de prisión por las órdenes de aprehensión pendientes, más las penas que resulten por los procesos que serán reactivados”.