Ante las recientes amenazas del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, de endurecer las políticas migratorias y deportar a migrantes en situación irregular, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) anunció que los templos católicos en México ofrecerán refugio a las personas en tránsito.
En un comunicado emitido por la Dimensión Episcopal de Pastoral de Movilidad Humana de la CEM, liderada por los obispos Eugenio Lira Rugarcía, de Matamoros-Reynosa, y Héctor Pérez Villarreal, de la Arquidiócesis de México, se destacó el compromiso de la Iglesia de brindar apoyo integral a los migrantes.
“Que nuestras casas, albergues y centros de acogida sean espacios donde encuentren techo y alimento; apoyo en su salud física, emocional y espiritual; ayuda para contactar a sus familias y obtener la documentación necesaria; así como asesoría y acompañamiento legal en los trámites requeridos”, detalla el documento oficial.
¿Dónde se ubicarán los albergues de la Iglesia?
La región norte contempla 31 centros de atención a migrantes; es la unidad de apoyo más grande de estás regiones y está a cargo de las siguientes diócesis: Arquidiócesis de Tijuana, Arquidiócesis de Hermosillo, Arquidiócesis de Monterrey, Diócesis de Mexicali, Ensenada, Ciudad Juárez, Matamoros, Nuevo Laredo, Tampico, Saltillo, Piedras Negras, Mazatlán, Torreón.
La región centro por su parte, contempla 11 centros de atención a migrantes a cargo de: la Arquidiócesis Primada de México, Arquidiócesis de Morelia, Arquidiócesis de Guadalajara, Diócesis de Irapuato, Querétaro, San Luis Potosí, San Juan de los Lagos.
La región sur incluye a 24 centros de atención a migrantes de las siguientes diócesis: Arquidiócesis de Oaxaca, Arquidiócesis de Puebla, Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, Diócesis de Tehuantepec, Puerto Escondido, Tapachula, San Cristóbal de la Casas, Tlaxcala, Coatzacoalcos, San Andrés Tuxtla, Córdoba, Veracruz, Tabasco e incluye la Prelatura de Cancún-Chetumal.
Iglesia pide solidarizarse con los migrantes
La CEM hizo un llamado a la sociedad para solidarizarse con los migrantes, especialmente ante las bajas temperaturas que afectan el norte del país. “Muchas personas y familias en situación de movilidad están viviendo momentos de angustia, dolor, miedo e incertidumbre ante las disposiciones migratorias del gobierno estadounidense”, subrayaron los representantes eclesiásticos.
Asimismo, la Iglesia Católica reiteró su disposición de colaborar con autoridades federales, estatales y municipales, así como con organizaciones religiosas y civiles, para generar una red de apoyo sólida. En el mensaje, se recordó la enseñanza de Jesús: “Traten a los demás como les gustaría que los demás los trataran a ustedes”.
Con esta medida, la Iglesia busca ofrecer un mensaje de esperanza y apoyo a los migrantes que enfrentan condiciones adversas en su intento por alcanzar el sueño americano o que han sido afectados por políticas migratorias restrictivas.
