Irán deporta diariamente a Afganistán a miles de refugiados. El Gobierno talibán asegura que apoya a quienes retornan.Por primera vez desde que los talibanes tomaron el poder, en agosto de 2021, un ministro de Exteriores iraní ha viajado a Afganistán.
Según la información oficial, el objetivo de la visita de un día del actual titular, Abbas Araghchi, fue mantener conversaciones diplomáticas sobre las tensiones existentes a lo largo de los aproximadamente 950 kilómetros de frontera compartida, así como sobre la situación de los refugiados afganos en Irán y el uso de los recursos hídricos del río Helmand.
Aunque Irán aún no ha reconocido oficialmente a los talibanes, mantiene relaciones diplomáticas con su Gobierno. La embajada iraní en Kabul está abierta y la afgana en Teherán ha sido entregada a los talibanes.
Desde 2023, el Gobierno iraní busca cada vez más la cooperación con los talibanes, sobre todo en vista del aumento de la migración procedente de Afganistán. En la actualidad, Irán está deportando hasta 3.000 refugiados cada día.
Miedo a la deportación a manos de los talibanes
"Los afganos son detenidos arbitrariamente, a veces golpeados y luego deportados", denuncia Marzia Rahimi, en entrevista con DW. Rahimi huyó de Afganistán con su familia hace dos años.
"Soy periodista y ejercí esta profesión durante diez años. Tras el regreso de los talibanes, me quedé sin trabajo. Mi vida dio un vuelco de repente. Temía por mí y por mi familia. Se prohibieron las escuelas secundarias para niñas a partir del sexto curso. Por eso, huí a Irán con mi marido y mis cinco hijos, porque quería salvarlos. Pero aquí tampoco pueden ir a la escuela".
Marzia carece actualmente de documentos. No se ha registrado como refugiada por miedo a que la deporten. Para pedir asilo, tendría que acudir al Servicio de Inmigración y Naturalización. "A cualquiera que intente hacer una solicitud allí, lo tratan muy mal y con superioridad, incluso lo insultan. Y, al final, casi no hay posibilidades de que te acepten".
No está claro cuántos ciudadanos afganos viven actualmente en Irán. Los afganos llevan 40 años huyendo a Irán, de la guerra civil, de la pobreza y ahora de los talibanes.
Según estimaciones de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), unos tres millones de afganos viven en Irán. De ellos, unos 750.000 están registrados oficialmente como refugiados.
Unos 500.000 son inmigrantes con permisos de residencia de corta duración y permisos de trabajo restringidos. Muchos otros carecen de papeles y se consideran ilegales. Estas personas trabajan, sobre todo, como mano de obra barata en obras de construcción o en empresas de la periferia de las grandes ciudades. A menudo, son explotadas sin piedad.
Malestar hacia los refugiados afganos
En diciembre de 2024, Amir Saeed Iravani, embajador y representante permanente de Irán ante las Naciones Unidas, aseguró que había "más de seis millones de afganos en Irán", una cifra aún mayor, lo que pone a prueba los limitados recursos del país. Según Iravani, Irán gasta más de diez mil millones de dólares al año en ellos, pero no recibe suficiente apoyo de la comunidad internacional.
Desde hace tiempo, en Irán hay un ambiente tenso hacia los refugiados. Tanto en Internet como en los medios tradicionales, aparecen casi a diario noticias sobre supuestos "refugiados criminales" o la presunta carga que suponen para el sistema sanitario. También se les culpa de la escasez de alimentos subvencionados, como el pan. Lo cierto es que Irán sufre, desde hace años, una crisis económica agravada por la mala gestión, la corrupción y las sanciones internacionales.
Marzia y su familia no reciben ninguna ayuda del Gobierno iraní. Ella y su marido tienen que buscar trabajos mal pagados para mantener a su familia.
"Nos comprometemos a ayudar a los afganos en Irán", promete Abdul Rahman Rashid, ministro talibán de Refugiados y Repatriación, en entrevista con DW. "Los refugiados que tengan documentos válidos deben tener acceso a la educación y a oportunidades de trabajo legal en Irán. Así se lo hemos comunicado a las autoridades iraníes. También apoyamos a los repatriados que vuelven a Afganistán".
Afganistán y los retornados
Pero se desconocen los recursos disponibles para ofrecer apoyo a los retornados. Jan Egeland, secretario general del Consejo Noruego para los Refugiados (NRC), advierte de que Afganistán no está preparado para el retorno de los numerosos refugiados de Irán y Pakistán.
Esta oenegé es una entidad humanitaria independiente, que trabaja para proteger y apoyar a las personas en todo el mundo. Es una de las pocas que siguen activas en Afganistán.
"Jan Egeland se reunió en Afganistán con familias con niños pequeños que habían regresado de Irán sin saber cómo iban a sobrevivir en Afganistán", escribe el Consejo Noruego para los Refugiados en respuesta a una consulta de DW. Al parecer, la inseguridad económica y la falta de oportunidades de empleo son las mayores preocupaciones de muchos retornados, lo que les provoca una enorme incertidumbre sobre sus futuras condiciones de vida.
Los refugiados que tienen documentos válidos tampoco están seguros en Irán, afirma el NRC. "Algunos de ellos han sido deportados, otros han abandonado Irán por temor a una deportación inevitable. Algunos viajaron como familias con niños que nacieron en Irán y ahora regresan a un país que no conocen".
(ms/rml)
