El presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, buscará el apoyo de los ediles auxiliares para ser “vigilantes” de los ductos de Pemex, a fin de detectar tomas clandestinas y evitar una tragedia como la explosión en San Pablo Xochimehuacan.
En entrevista con medios, tras la reapertura de la calle 102 Poniente, el panista apuntó que el próximo miércoles sostendrá la primera reunión con las autoridades electas en las 17 juntas auxiliares, a fin de revisar las facultades y competencias que tienen ellos y el Ayuntamiento.
Precisó que ya hubo algunos acercamientos con los presidentes de la zona norte, donde dijo, “es indispensable que nos ayuden a estar vigilantes” de las zonas donde transitan los ductos de Pemex, a fin de evitar una tragedia como la del pasado 31 de octubre, en Xochimehuacan.
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Apuntó que su gobierno ya cuenta con un presupuesto designado para obras, como son estancias infantiles, espacios deportivos, pero no hay uno específico que se le asigne a cada edil, pues estos no tienen la facultad de licitar obras directamente, ya que eso lo deben gestionar ante el municipio de Puebla.
Sin embargo, reiteró que estarán abiertos a escuchar sus opiniones y las demandas o necesidades que tienen la ciudadanía, a fin de poder encontrar soluciones en conjunto y trabajar de forma coordinada.
Tras la explosión en San Pablo Xochimehuacan, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, apuntó que su gobierno es responsable de informar sobre la detección de tomas clandestinas, pero Pemex y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) son los encargados de llegar a los sitios y hacer las clausuras correspondientes.
