Activistas ambientales confían en que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) derogará la Ley que Regula la Prestación de los Servicios de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento del estado, para que se permita abrir la discusión para la construcción de una “genuina” ley.
Enrique Uribarren, presidente del Observatorio Ciudadano para la Protección Ambiental, avaló la acción de inconstitucionalidad interpuesta por la Consejería Jurídica de la presidencia de la república, el pasado 7 de mayo, y ante la cual se está a la espera de análisis y resolución.
“Ojalá que, eventualmente, la Suprema Corte se pronuncie por el que se tenga que derogar esta ley de prestación de servicios y se abra la oportunidad a que realmente se haga una genuina ley de aguas para el estado de Querétaro. Y que, además, solo una candidata reconoció la necesidad de hacer una legislación integral”.
Explicó que esta legislación, ya generó dos revisiones, una de ellas con la presentación de amparos tras su emisión en mayo de 2022, y que sigue subsistiendo, así como esta acción ante las recientes reformas de abril de 2024.
“En lo personal diría que son dos grandes escollos que tiene que solventar esta ley”, explicó al respaldar la acción emprendida por la federación al considerar que existen cuestiones que contravienen el texto constitucional.
Explicó que parte de la legislación, ya considera aspectos como el tratamiento y potabilización del agua, por lo que de haber deficiencias en esta materia se trataría de omisión de los organismos operadores.
En cuanto a la captación de agua, extracción de pozos, y medidas para que se reabastezcan, indicó que no es algo que se contempla en la ley, por lo que la equiparó a una serie de televisión y ejemplificó que lo legislado corresponde al capítulo 7, pero no se cuenta con los primeros episodios.
“Desde la preservación de las fuentes de origen, como favorecer las condiciones en la cuenca para que haya el restablecimiento y condiciones que permitan la captación, la ley no la menciona, ni recuperación de ecosistemas, por eso decidimos falta una genuina ley de aguas”, finalizó.
