A casi cuatro años de los hechos, el caso de Athos y Tango no solo se sigue en búsqueda de justicia para los animales afectados, sino que también ya ha abierto camino en el reconocimiento jurídico de los derechos animales en México, destacó la abogada, Mónica Huerta, al informar que ya generó jurisprudencia.
Después de una larga batalla legal, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resolvió en favor de la protección animal y en contra de irregularidades detectadas en el proceso judicial.
Dicha sentencia no solo restablece la condena original de 10 años y 6 meses de prisión para el responsable, sino que también establece un precedente obligatorio para casos futuros relacionados con los derechos de los animales y supuesto de doble enjuiciamiento, criterios que deberán ser observados si existen casos similares a este.
Recordó que los canes fueron envenenados el 13 de junio de 2021, pero el responsable se amparó y el colegiado emitió una petición de cumplimiento exprés con una nueva pena de cinco años, la cual fue conmutada por una multa de 20 mil pesos.
Por esta inconformidad, se recurrió a la SCJN, la cual determinó que no existió un doble enjuiciamiento y que la sentencia inicial debía sostenerse, revocando lo emitido por el colegiado queretano. Esta resolución llegó el 17 de enero al tribunal colegiado, la cual ya debería haber sido acatada, sin embargo, aún no ha sucedido por lo cual se cuestionó este retraso.
Negligencia, arbitrariedad y discriminación hacia los animales, es la constante del trato de la autoridad local hacia el caso, por lo que tampoco no descartó la posibilidad de presentar una queja contra el magistrado que inicialmente emitió la sentencia modificada, ya que se observa que también se falseó información.