Para Javier Hernández no ha sido fácil llegar a Europa, el camino ha sido largo y empedrado. Hoy enfrenta un nuevo reto que vencer, una fractura de clavícula que lo deja fuera de la Copa Oro con la Selección mexicana y, un estado anímico que equilibrar para continuar en unas semanas con su carrera profesional la cual es una incógnita.
Pero esta no ha sido la única situación que ha mandado al delantero a la lona, de donde siempre ha salido adelante. La primera vez que Hernández enfrentó un revés en la cancha fue hace poco más de 10 años, ya que formó parte de todos los proceso de las categorías menores con la Selección mexicana, pero eso no fue suficiente para ser requerido en el Mundial Sub-17, quedando fuera de la convocatoria de Jesús Ramírez a quienes la gloria envolvió en Perú 2005 con el título de la copa del mundo junto a Giovani dos Santos y Carlos Vela.
Javier tuvo que dejar atrás ese trago amargo y continuar su formación en una filial del Rebaño, Coras Chivas. Al equipo tapatío llegó desde los nueve años, pero fue hasta el Apertura 2006 cuando el debut en Primera División se concretó, donde anotó el último gol del 4-0 ante Necaxa, después de ahí no volvió a agitar la red en los siguientes 21 duelos que disputó entre 2006 y 2008, donde a la falta de actividad lo llevó a pensar en diferentes soluciones como dejar el futbol a sus 21 años.
Pero al ser creyente de sus valores, sacrificio y entrega, la suerte le comenzó a sonreír. Para el 2004 se reencontró con el gol, sumando cuatro tantos en 15 partidos, pero la mejor versión del “Chicharito”, fruto de su espera y tenacidad llegó en el Apertura 2009, convirtiéndose en un emblema de las Chivas y de la Liga. Jugó todos los partidos sumó 11 anotaciones a su cuenta personal. Fue ahí, donde el camino se acomodó y un año más tarde emigró a Inglaterra con el Manchester United.
Sintió el infierno con los “Reds”
Ir a Europa era un gran paso, pero mantenerse y demostrar el porqué estaba ahí fue un reto. Bajo el mando del técnico Alex Ferguson, tuvo cierta regularidad con los “Reds”, pero el infierno llegó cuando el equipo lo tomó David Moyes, quien no le tuvo confianza, relegándolo en el banquillo sin ver acción en la Liga de campeones y en la Premier. El panorama no podía ser peor y tras la llegada de un tercer técnico, Louis Van Gaal, el mexicano tuvo que salir, ya que no entraba en los planes del holandés.
Hola y adiós
Tras dejar el Manchester United, el sol volvió a salir Hernández llegó al Real Madrid a préstamo, equipo con el que desde un principio se sabía que la competencia estaría presente 24 horas al día, y así fue, poca actividad, minutos acumulados en el banquillo, llevaron al equipo español a no ejercer la opción de compra. Hoy el futuro es indeciso para Javier y con una lesión podría parecer que el panorama es poco alentador.
Suplente de mundiales
Jugó su primer mundial en Sudáfrica 2010, Javier Aguirre, técnico de aquel momento lo utilizó como relevo de Guille Franco. Para Brasil 2014, su segundo mundial no llegaba en su mejor momento y Miguel Herrera actual estratega del Tri, tampoco lo colocó dentro de su 11 inicial en ninguno de los cuatro partidos.
Estos son algunos de los momentos más complicados que ha sufrido profesionalmente el delantero mexicano quién hoy fue operado con éxito de la clavícula y estará fuera de actividad de tres a cuatro semanas.
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