MADRID, 5 (EUROPA PRESS)
El Ejército de Israel ha asegurado este miércoles que la irrupción de agentes en el interior de la mezquita de Al Aqsa, que ha desencadenado unos incidentes que se han saldado con más de 300 detenidos, tuvo lugar tras un "intento de negociación" para que un grupo de personas que se había "atrincherado" en el interior pusiera fin a sus acciones y evacuara las instalaciones.
El portavoz del Ejército israelí Daniel Hagari ha señalado que "cerca de 400 jóvenes palestinos de Jerusalén Este se atrincheraron dentro de la mezquita con fuegos artificiales y piedras" y ha agregado que "tras los rezos de la noche, la Policía israelí intentó negociar con ellos para que evacuaran (el lugar), pero esto fracasó y provocó que la Policía tuviera que entrar en la mezquita en torno a las 1.50 horas (hora local), donde fueron recibidos de forma violenta".
"Hay cerca de 300 responsables de disturbios violentos detenidos", ha manifestado, antes de hacer hincapié en que la situación en la Explanada de las Mezquitas, conocida por los judíos como Monte del Templo, "es ahora tranquila". "Los fieles musulmanes y turistas han vuelto a la zona para los rezos de la mañana. La política israelí sigue siendo la misma. Trabajamos para garantizar la libertad religiosa y de rezo en este momento de festividades religiosas", ha explicado.
En este sentido, ha incidido en que "cientos de miles de fieles musulmanes han rezado pacíficamente en el Monte del Templo durante este Ramadán". "Seguiremos haciendo todo lo posible para mantener la paz en el lugar", ha aseverado Hagari, en medio de las críticas palestinas e internacionales a las acciones de las fuerzas de seguridad israelíes en el interior de la mezquita de Al Aqsa.
La versión del Ejército va en línea con la facilitada por la Policía israelí, que ha subrayado tras los incidentes que había varias decenas de hombres jóvenes atrincherados en una de las salas de la mezquita desde primera hora de la noche, con la supuesta intención de cometer acciones violentas. Los agentes habrían intentado desalojarlos de forma pacífica antes de entrar en el edificio por la fuerza.
Por otra parte, Hagari ha confirmado "un aumento de la violencia desde Gaza" y ha señalado que diez proyectiles han sido disparados desde la Franja contra territorio israelí. "Ha habido tres oleadas de diez cohetes. Cuatro han sido interceptados, cinco han caído en zonas abiertas y uno ha caído cerca de una fábrica en Sderot. No hay víctimas", ha reseñado.
"El Ejército ha respondido bombardeando tres posiciones y puestos militares que pertenecen a la organización terrorista Hamás en Gaza", ha apuntado, antes de manifestar que el Ejército "está en alerta en todas las zonas". "Si Gaza ataca, el Ejército de Israel responderá con firmeza. No estamos interesados en una escalada, pero estamos preparados para todos los escenarios", ha puntualizado.
Hagari ha confirmado además que un militar ha resultado herido en un incidente en la ciudad cisjordana de Beit Omer y ha detallado que "está recibiendo atención médica". "También ha habido alteraciones del orden en el paso de Salem, en el norte de Judea y Samaria --nombre bíblico de Cisjordania--", ha dicho, antes de detallar que "dos sospechosos que planeaban un ataque terrorista fueron arrestados cuando portaban armas".
"Este momento del año es importante para todo Israel, sin importar la religión de cada uno, y estamos decididos a superar todos los obstáculos para garantizar que son unas fiestas felices para todos los residentes del Estado de Israel. Seguiremos protegiendo a los civiles israelíes del terrorismo en todos los frentes y actuando para permitir a todos celebrar las fiestas de Pascua judía, Ramadán y Pascua en paz y tranquilidad", ha apostillado.
La Explanada de las Mezquitas es el corazón religioso de Jerusalén Este y descansa en uno de sus laterales sobre el Muro de las Lamentaciones, último vestigio del Templo de Salomón judío. El 'statu quo' en la zona impide a los judíos rezar en el lugar y autoriza únicamente que visiten el lugar en horarios predeterminados y que lo recorran a través de una ruta fijada, acompañados por policías que deben vigilar que los fieles no recen o que introduzcan banderas israelíes u objetos religiosos.
Israel se hizo con el control de la Explanada de las Mezquitas y el resto de la Ciudad Vieja de Jerusalén durante la Guerra de los Seis Días (1967). Sin embargo, permitió que Jordania siguiera manteniendo la autoridad religiosa en el lugar y, según el acuerdo de paz, reconoció el "papel especial" de Jordania sobre "los lugares santos musulmanes en Jerusalén".