MARSELLA, Francia (AP) — Un edificio residencia en la ciudad portuaria francesa de Marsella se derrumbó el domingo de madrugada en una fuerte explosión que se vio seguida por un incendio entre los escombros que complicaba las labores de rescate.
Más de seis horas después de que el edificio de cinco plantas se viniera abajo seguía sin saberse si había fallecidos.
Más de 100 bomberos intentaban apagar las llamas bajo la enorme pila de escombros, en una operación lenta y delicada que trataba de no lastimar a personas que pudieran estar atrapadas.
Dos edificios contiguos sufrieron derrumbes parciales y uno corría riesgo de caerse, explicó el alcalde de Marsella, Benoit Payan, lo que creaba un desafío adicional.
“Los bomberos miden minuto a minuto la mejor forma de apagar el fuego”, dijo el alcalde en una conferencia de prensa televisada. “Las vidas de los bomberos también están en fuego”.
El sonido de la explosión poco antes de la una de la madrugada se oyó en otros vecindarios. Las calles cercanas quedaron cortadas.
Los residentes de los edificios vecinos fueron evacuados y seis estaban hospitalizados, dijo Payan.
El edificio afectado estaba en una zona antigua en el centro de la segunda ciudad más grande de Francia.
“Intentamos sofocar las llamas al tiempo que preservamos las vidas de las posibles víctimas bajo los escombros”, dijo Lionel Mathieu, comandante de la brigada de bomberos de Marsella. El intenso calor hacía imposible enviar equipos de perros de rescate, añadió.
El alcalde dijo que la causa “probable” del siniestro era una explosión, aunque recalcó que una investigación lo determinaría con certeza.
“Debemos prepararnos para tener víctimas”, advirtió.
Se esperaba que el ministro del Interior, Gerald Darmanin, visitara el lugar más tarde el domingo.