La jefa de Gobierno Clara Brugada encabezó los festejos del Día de Reyes en el Zócalo de la Ciudad de México, en donde miles de familias se dieron cita para disfrutar de una celebración llena de color, alegría y tradición con la partida de la Mega Rosca de 400 metros lineales, que unió a los capitalinos este 5 de enero.
La mandataria capitalina rindió homenaje a las “Reinas Magas”, destacando su papel transformador en esta celebración. “También hay Reinas Magas, no solo Reyes Magos. Son esas mujeres que, con su magia cotidiana, logran que los niños y niñas reciban un regalo lleno de amor y esperanza”, subrayó.
La celebración incluyó la entrega de más de 15 mil juguetes lúdicos, cuidadosamente seleccionados para no promover la violencia, incentivando en su lugar la imaginación y la creatividad de los más pequeños.
La imponente Mega Rosca fue producto del esfuerzo de mil 450 panaderos de la Cámara Nacional de la Industria Panificadora y Similares de México. Elaborarla fue una hazaña que requirió 6 mil 200 kilos de harina, 800 kilos de mantequilla, 18 mil 200 huevos, 750 litros de leche, y una cuidada mezcla de ingredientes que incluyó higos, ate de vivos colores y una esencia de vainilla que impregnaba el aire con su aroma dulce.
Además, 20 mil cuadritos de leche tetrapack, proporcionados por la Secretaría de Desarrollo Económico y FEMSA, acompañaron esta experiencia culinaria, añadiendo un toque de calidez a la celebración.
Pero el espíritu festivo no se limitó al Zócalo. Clara Brugada recordó que en las 16 alcaldías se han distribuido 900 roscas más, junto con 10 mil lechitas de sabor, juguetes y actividades culturales que incluyen teatro, danza y música. Estas acciones, que han llevado alegría a todos los rincones de la ciudad, también han generado una importante derrama económica de 5 mil 519 millones de pesos.
El director del Fondo de Cultura Económica, Paco Ignacio Taibo II entregó 4 mil 500 libros de literatura infantil, sembrando semillas de imaginación en la niñez capitalina. “Cuando un espacio público está lleno de niñas y niños jugando, ese lugar se convierte en el más seguro que podemos tener. Ellos son el alma de nuestra ciudad”, afirmó Brugada con convicción.