Una ballena jorobada de aproximadamente siete metros de largo apareció muerta en la playa de Coyuca de Benítez, con una cuerda atada y restos de una red de pesca enredados en la cola, lo que ha generado denuncias por parte de ambientalistas sobre prácticas pesqueras irresponsables.
De acuerdo con restauranteros y habitantes de la zona, el mar arrojó el cuerpo del cetáceo a la orilla, donde finalmente quedó varado sobre la arena. Vecinos que acudieron al lugar intentaron revisar al animal, pero confirmaron que ya no presentaba signos vitales. Detectaron una cuerda saliendo de su boca y redes de pesca adheridas a su cuerpo.
Pesca irresponsable
Organizaciones como Los Guerrero Ambientales lamentaron que el mamífero haya muerto justo el martes 22 de abril, Día de la Tierra y la Naturaleza, y atribuyeron el hecho a la contaminación marina y a la “pesca irresponsable”.
“Este hecho es grave, no sólo por el daño a la biodiversidad, sino porque la descomposición del cuerpo puede poner en riesgo la salud pública y contaminar la playa”, declaró un integrante de la asociación a la agencia EFE.
Vecinos y comerciantes han solicitado la intervención de autoridades ambientales del Gobierno federal y de la Secretaría de Gestión Integral de Riesgo y Protección Civil de Guerrero, preocupados por el destino del cadáver. Temen que el cuerpo del animal pueda ser arrastrado nuevamente mar adentro y descomponerse en el agua.
Hasta el momento, las autoridades no han emitido un posicionamiento oficial sobre las causas de la muerte del ejemplar ni sobre los protocolos para su disposición final.