La renuncia de Agustín Carstens al Banco de México (Banxico) se registra en medio de un distanciamiento y hasta contradicciones con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), en el manejo de la política económica y monetaria del país.
El director del Departamento de Economía de la Universidad Iberoamericana (UIA), Pablo Cotler, explicó que la diferencia principal está en el señalamiento reiterado que Carstens hizo a la SHCP –durante las últimas semanas– sobre la necesidad lograr un manejo mejor de la deuda pública del país.
Lo anterior, debido al fuerte incremento en el saldo de los adeudos contratados por el Gobierno federal, que durante el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto se disparó de 36.4% a 48% del Producto Interno Bruto (PIB), cifra que se anticipa creerá hasta 50.05% del mismo indicador al cierre de 2016.
«En primera instancia, la renuncia de Carstens obedecería a la oportunidad de un trabajo nuevo, como gerente del Banco de Pagos Internacionales, pero crece el sospechosismo sobre las razones reales del hecho, debido a que se da en medio de un periodo muy fuerte de volatilidad financiera y bajo crecimiento.
«Lo cual nos hace cuestionar si existe un conflicto entre las políticas económicas del Gobierno, las medidas para garantizar la salud de las finanzas en un entorno adverso y las acciones monetarias del Banxico», que al final afectan el crecimiento del país, apuntó el especialista.
«La renuncia de Agustín Carstens se da en un mal momento. Los mercados son muy sensibles y ello abona a la incertidumbre financiera que ha llevado al dólar por arriba de 21 pesos en los bancos, pero el efecto será transitorio». Pablo Cotler, director de Economía de la UIA
Distanciamiento evidente
En una entrevista con Publimetro, el directivo de la UIA afirmó que hay un distanciamiento entre el Banxico y la SHCP en el manejo de las finanzas públicas; derivado de la insistencia de Agustín Carstens para que el Gobierno federal logre un superávit primario en las finanzas, que permita controlar el aumento en la deuda pública.
«Y aunque lo anterior se incluye en el Presupuesto de Egresos de la Federación de 2017, aún está en veremos su cumplimiento, debido a que muchas disposiciones establecidas en tal documento están agarrados con pinzas», ante la debilidad de la economía y la incertidumbre financiera global.
A su vez, apuntó Cotler, las metas de la Secretaría de Hacienda –en materia de crecimiento nacional e impulso al mercado interno– se han visto afectadas o reducidas por el alza en las tasas de interés decretada por el Banxico en los últimos meses, lo cual marca un precedente.
En noviembre pasado, el banco central determinó un alza de 0.50 puntos en su tasa de interés, que subió hasta 5.25%, para enfrentar la volatilidad financiera y el encarecimiento del dólar, lo cual abre la puerta a un aumento en el costo del financiamiento para las empresas, menos empleos y un alza en los prestamos hipotecarios, al consumo y personales.
¿Quién sustituiría a Carstens?
El director del Departamento de Economía de la Ibero señaló que la designación del nuevo gobernador del Banxico se da a través de una terna de candidatos que el presiente del República presenta al Senado, cuyos integrantes eligen y ratifican a uno de ellos.
Sin embargo, refirió, entre los funcionarios con los perfiles más importantes y competentes para el cargo están:
- El actual Secretario de Hacienda, José Antonio Meade.
- Los subgobernadores del Banxico: Roberto del Cueto Legaspi, Javier Eduardo Guzmán Calafell, Manuel Ramos Francia y Manuel Sánchez González.
- Y el exsecretario de Hacienda, Luis Videgaray.
¿Cuál es el perfil más adecuado?
Pablo Cotler, explicó que el próximo titular del Banco de México debe tener características muy específicas para enfrentar los retos y compromisos que deja Agustín Carstens, entre las que destacan:
- Conocimientos probados en materia económica, financiera y monetaria, así como experiencia en cargos públicos.
- Ser una persona muy callada, discreta para manejarse en actividades públicas o aparecer en medios de comunicación.
- Capacidad alta de reflexión y análisis.
- Habilidades de negociación y entendimiento con los funcionarios del Gobierno federal y la SHCP.
- Tener la fortaleza, personalidad y dominio para dialogar, advertir y hacer propuestas para impulsar el crecimiento del país y evitar riesgos o amenazas a la economía.
